Experiencia en el triduo pascual
Buenos días espero que hayan
pasado una semana santa excelente. Los cristianos católicos en semana santa
vivimos el triduo pascual, son tres días en los cuales vivimos y recordamos la
muerte y resurrección de nuestro señor Jesús.
Nuestro triduo pascual juvenil fue un triduo diferente a los demás lleno de emociones y de vivencias únicas cada
uno de los que participamos no salimos igual, cada día toco mi vida de una
manera diferente los temas, las dinámicas, los momentos de oración y reflexión
fueron únicos.
Les voy a explicar que aprendí de
cada día, porque no creo que pueda expresar todo lo que viví primero porque no
terminaría hoy y segundo porque lo limitaría.
Jueves santo:
El tema fue Dios me mira con amor, en este día recordamos
la mayor expresión de amor y de humildad que realizo Jesús que fue la santa
cena con sus discípulos y el lavatorio de los pies. La humildad y el amor que
Dios muestra al lavarle los pies a sus discípulos es la misma que humildad que
tenemos que practicar muchas veces nosotros tenemos que mostrar ese amor y
humildad con nuestros jefes, nuestra pareja, nuestros padres, con un amigo. Fue
un día maravilloso ver como Dios me ama desde mi realidad, muchas veces
queremos que Dios nos saque de lo que estamos viviendo, que nos quite el dolor
por el cual estamos pasando, Dios te mira con amor desde tu realidad él desde
donde estas trata de transformar tu vida solo tienes que reconocer que es lo
que Dios quiere hacer contigo en esa realidad.
Recuerda: Dios te mira con amor
desde tu realidad, trata de encontrar la
mirada de Jesús en tu situación.
Viernes Santo:
Este día acompañamos a Jesús al
momento de su muerte. Fuimos a una comunidad muy pobre a evangelizar y entregar
alimentos a las personas que más lo necesitaban de esa comunidad. Caminar hasta
ese lugar me hizo reflexionar mucho sobre mi situación, personas que no tienen
casi nada y son felices, que viven alejados de casi todo, que tienen que
caminar largos caminos para poder tomar un carro o una guagua para dirigirse a
sus destinos me permitió ver que a eso
nos manda Jesús a ver cuáles son las necesidades de los demás, a no quejarme
tanto de lo que me pasa y mirar un poco más lejos de mi situación fue una
experiencia única.
Este día nos preparamos para
morir a todo nuestros pecados, morir a esa persona acomodada pecado, morir a
todas esas cosas que no nos permiten avanza y acompañar a Jesús en su agonía hasta el calvario.
Sábado santo:
Nosotros los cristianos católicos vivimos para este día, para esperar la
resurrección de Jesús que venció la
muerte y resucito. Resucitar con Jesús para ser una persona nueva y cumplir con
lo que nos ha enviado y darnos cuenta que tenemos la oportunidad de ser una persona
nueva. Es una noche memorable.
Gracias a Dios y a todas las
personas que me permitieron vivir este triduo tan maravilloso, gracias por
todas las experiencias vividas, por todo el amor que pude sentir en tan solos
tres días. Gracias infinitas.
Que Dios resucitado nos permita
vivir una verdadera resurrección, que cada día podamos transmitir su amor en
cada corazón que toquemos.
Mariel Marrero
No hay comentarios:
Publicar un comentario